Crítica de ‘Malavita’: mafiosos pero majetes

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Malavita’ (‘The family’) es una peliculilla de Luc Besson en la que el director francés se ha dado el lujo de contar con dos estrellas norteamericanas llenas de carisma: Robert De Niro y Michelle Pfeiffer. Esta frase resume la declaración y los talentos del film que cuenta una historia típica de mafiosos sin mucha trascendencia.

‘Malavita’ trata un episodio de la huida de una familia que trata de adaptarse a su nueva identidad en un pueblo del Norte de Francia, Normandia, elegido por el programa de protección de testigos. Giovanni Manzzoni es un importante miembro de la cosa nostra que ha delatado al resto de  sus hermanos, razón por la cuál ha tenido que abandonar su ciudad y vida, además de estar amenazado de muerte por el clan. Evidentemente soplón, mujer e hijos no son precisamente modelos de comportamiento y terminarán haciendo de las suyas en el pueblo: hacer la compra, integrarse en el instituto o arreglar la fontanería son tareas que se solucionan de una manera muy personal.

El tono de estas peripecias es cómico, aunque sin pasarse. La profundidad y complejidad de los personajes también se ve limitada por ese humor que, sin embargo, no termina de desarrollarse y el guión (obra de Besson y Michael Caleo a partir de la novela homónima de Tonino Benacquista ) parece un simple pasaje elegido al azar con la única intención de presentarnos una familia, como hemos dicho, mafiosos pero en cierto punto bastante ‘majetes’.

Así Besson cuenta con los simples hallazgos de haber convencido a De Niro, a quien el papel le tiene que salir de carrerilla, y a Pfeiffer. Ellos dos son el principal atractivo de un producto que no les pide mucho y donde el carisma que lucen no viene de sus papeles en sí sino del reconocimiento heredado de su carrera, es decir, el que tienen por ser quienes son, ya de carácter vitalicio. Vamos que no hay mucho esfuerzo ni trabajo interpretativo a desarrollar, hacen lo necesario, lo que para De Niro, acostumbrado últimamente a este tipo de trabajos será nada más y nada menos que otro personaje ‘alimenticio’.

A estos dos podemos encontrar a los ‘dos hijos’ del mafioso, Diana Agron (superconocida por su papel en la serie de televisión ‘Glee’) y John D’ Leo(‘El Luchador’, ‘Los amos de Brookling’, ‘Sácame del paraíso’), además de  a Tommy Lee Jones, Jon Fredda o Stan Carp.

‘Malavita’ ofrece sin más un ratito entretenido, pero olvidable al instante.

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